La agricultura latinoamericana debe superar el "miedo" a la tecnología
"Los países de América Latina deben "vencer la narrativa del miedo" y abrazar la tecnología para garantizar la seguridad alimentaria de la región y del mundo".
Valdemar Fischer, Presidente Junta Directiva CropLife Latin America y Director de Syngenta para América Latina
Brasilia, 27 de junio de 2019 (EFE).- El XII Foro Internacional Innovación para la Sostentabilidad en la Agricultura que se celebró el jueves 29 de junio de 2019, en Brasilia, concluyó que los países de América Latina deben "vencer la narrativa del miedo" y abrazar la tecnología para garantizar la seguridad alimentaria de la región y del mundo.
"Tenemos el reto de cambiar la narrativa del miedo" y "vencer" la "resistencia a la ciencia y tecnología en la agricultura", dijo el director de Syngenta para América Latina, Valdemar Fisher, durante su intervención en un foro promovido por la organización CropLife Latin America y la Asociación Nacional de Defensa Vegetal (ANDEF) de Brasil.
Según Fisher, esos temores incluyen muchas veces a los plaguicidas que han mejorado la resistencia de muchos cultivos a las plagas, pero aún así son objeto de "prejuicios" que, en ocasiones, son sembrados por campañas "interesadas" de grupos que se presentan bajo la fachada de la ecología.
Fisher sostuvo que la industria agrícola, en las últimas décadas, ha invertido en procesos para garantizar alimentos de mejor calidad, con un más apropiado uso de los suelos y un menor impacto ambiental, pero aún así debe hacer un mayor esfuerzo para comunicar ese avance y explicar la incidencia de la tecnología en ese nuevo panorama.
"Mucha parte de la población urbana desconoce en gran parte los desafíos que el productor enfrenta en el campo, con el clima, las plagas y enfermedades", y por falta de una información adecuada, en ocasiones ignora los beneficios de la tecnología, apuntó.
En ese punto coincidió el presidente ejecutivo de CropLife Latin America, José Perdomo, quien resaltó que, en los últimos 30 años, el sector agrícola latinoamericano "ha hecho un enorme esfuerzo en el área de investigación", pero "quizás ha fallado en la comunicación".
Según dijo el ejecutivo de CropLife Latin America, los empresarios del sector manejan toda la "información científica", pero "se comunican sobre ese asunto entre ellos" y "el resto de la sociedad no entiende" el impacto que la tecnología tiene en la mejora de la producción, tanto en cantidad como en calidad y hasta en sus aspectos sanitarios.
Fisher subrayó en declaraciones a EFE que "hoy el mundo agrícola trabaja en un escenario cada vez más complejo, con escasez de recursos naturales y una población en aumento, que se urbaniza, que vive más tiempo" y requiere más y mejores alimentos.
El ejecutivo de Syngenta recordó algunas cifras barajadas por organismos internacionales y dijo que el sector agrícola está frente a la obligación de elevar su producción entre un 30 % y un 50 % para el año 2050, a fin de garantizar la alimentación de una población mundial que llegará entonces a unas 9.000 millones de personas.
En ese panorama, explicó que "el desafío" es poder "producir más alimentos utilizando menos recursos, menos tierra, con menos agua y menos energía", y que al mismo tiempo esos productos tengan "mayor calidad, sean más sanos y también más nutritivos".
En ese escenario, sostuvo que "solo con la combinación y el manejo de tecnologías, incluyendo las digitales y la agricultura de precisión", se "avanzará hacia una producción más sostenible", que en el caso de América Latina serviría para consolidar a la región como el más grande y fiable abastecedor de alimentos del mundo.
"Creemos en América Latina y creemos que, como región, podemos consolidar nuestro potencial agrícola" en un mundo que necesitará cada vez más alimentos, indicó.
Según dijo el director de Syngenta, "la agricultura representa una de las actividades más nobles del planeta" y "una de las áreas en las que América Latina puede ser cada vez más protagonista" de la economía mundial y sustentar su propio crecimiento y desarrollo tanto económico como social. EFE